"Si no estás pagando por el producto, tú eres el producto." Esta frase se ha vuelto un cliché, pero su profundidad es cada vez más alarmante. Creemos que usamos Google, TikTok o Instagram de forma gratuita, pero el precio es mucho más valioso que cualquier suscripción: nuestra atención y nuestros datos.
La Métrica más Valiosa: El Scroll y la Mirada
Vivimos en una Economía de la Atención. Las Big Tech no compiten por dinero, compiten por los milisegundos que pasas mirando una pantalla. El algoritmo está diseñado para ser una máquina de dopamina que te mantiene en un estado de scroll perpetuo.
Tu atención es el recurso escaso, y el algoritmo es la herramienta más sofisticada jamás creada para extraerlo. Cada like, cada pausa, cada búsqueda es un dato que se añade a tu perfil para hacerte más predecible y, por lo tanto, más vendible a los anunciantes.
La Fatiga de Decisión y el Costo Cognitivo
El costo real de este internet "gratis" no es solo la pérdida de privacidad; es el costo cognitivo. Estar constantemente bombardeado por información, notificaciones y publicidad genera lo que se conoce como fatiga de decisión.
Estamos siempre semi-distraídos, incapaces de enfocarnos profundamente en una sola tarea (gracias, notificaciones). Esto nos hace menos productivos, más ansiosos y, paradójicamente, más vulnerables a la manipulación. El precio de entrada al internet "gratuito" es la paz mental y la capacidad de concentración.
La nueva literacidad digital no es saber usar una computadora, sino saber cuándo y cómo desconectarse de esta máquina de extracción de atención.

0 Comentarios