Han pasado más de doce meses desde que 2024 nos regaló algunos de los gadgets más experimentales y salvajes de la historia reciente. Pantallas transparentes, anillos que monitorizan tu salud 24/7, pantalones que te hacen sentir 30 libras más ligero al subir una montaña. Parecían ciencia ficción, y muchos apostaban a que desaparecerían en semanas. Ahora, desde finales de 2025, es momento de hacer cuentas: ¿qué sobrevivió y qué quedó como experimento fallido?
La laptop transparente: el concepto que nunca llegó a tu escritorio
En el Mobile World Congress de 2024, Lenovo presentó su ThinkBook Transparent Display, la primera laptop con pantalla transparente del mundo. Una pantalla OLED real que podías ver a través de ella. La promesa era revolucionaria: "interactuar con objetos físicos detrás de la pantalla usando IA y realidad aumentada".
¿Qué pasó un año después? Exactamente lo que muchos temíamos: se quedó en concepto. Nunca llegó al mercado como producto comercial. Samsung y LG también mostraron pantallas transparentes en 2024, generando expectativa masiva, pero en 2025 seguimos esperando que alguien lance un dispositivo transparente que puedas comprar. La tecnología existe, pero parece que nadie ha encontrado un caso de uso lo suficientemente convincente para producirlo en masa.
Pantalones motorizados: la idea genial que nadie adoptó masivamente
Los MO/GO pants prometían cambiar el senderismo para siempre. Pantalones con motores integrados que te ayudan a caminar, haciendo que sientas que pesas 30 libras menos al subir cuestas, y apoyando tus rodillas en descensos para reducir el esfuerzo y prevenir resbalones.
Un año después, el veredicto es mixto. La tecnología funciona, pero el producto no explotó como se esperaba. ¿Las razones? Precio elevado, peso adicional y el hecho de que, seamos honestos, la mayoría de la gente no hace senderismo tan seguido como para justificar pantalones motorizados de cientos de dólares. Quedó como un nicho para entusiastas extremos del hiking, pero no como la revolución del movimiento humano que prometía ser.
El Galaxy Ring: el wearable discreto que sí cumplió
Samsung lanzó el Galaxy Ring en 2024, apostando fuerte al monitoreo de salud 24/7 sin tener que llevar un smartwatch enorme en la muñeca. El anillo usa sensores avanzados potenciados por IA para recopilar datos sobre sueño, actividad física, frecuencia cardíaca y más.
A finales de 2025, el Galaxy Ring es uno de los pocos éxitos reales de esa época. Samsung iteró sobre el diseño, mejoró la duración de batería y expandió su ecosistema de integración con otros dispositivos Galaxy. No es un fenómeno masivo, pero encontró su mercado: personas que quieren monitoreo constante sin la incomodidad visual de un reloj inteligente. La era de los wearables discretos llegó, y el Galaxy Ring la lideró.
iPad Pro M4: el que sí cambió las reglas del juego
Apple sorprendió a todos en 2024 al lanzar el iPad Pro con chip M4, saltándose toda una generación de procesadores. Con solo 5.1mm de grosor en la versión de 13 pulgadas, era el dispositivo más delgado que Apple había fabricado jamás. La pantalla "Tandem OLED" ofrecía colores ricos, negros profundos y un brillo máximo de 1,600 nits.
Un año después, el iPad Pro M4 sigue siendo el estándar de oro en tablets profesionales. Diseñadores, editores de video y profesionales creativos lo adoptaron masivamente. El M4 llegó después a las MacBook Pro, confirmando que Apple usó el iPad como campo de pruebas. La apuesta funcionó: el iPad Pro dejó de ser "solo un tablet grande" y se consolidó como una estación de trabajo profesional ligera y poderosa.
Los fracasos que todos vimos venir: Humane AI Pin y Rabbit R1
2024 también nos dio ejemplos perfectos de cómo la IA puede fallar espectacularamente cuando se intenta integrar en hardware sin pensar bien el caso de uso. El Humane AI Pin y el Rabbit R1 prometían revolucionar cómo interactuamos con la tecnología.
Ambos fracasaron de forma épica, y en 2025 ya casi nadie los recuerda. El AI Pin de Humane, ese pequeño dispositivo que se enganchaba en tu ropa con proyección láser, resultó ser lento, poco preciso y con una batería que duraba menos que una reunión de Zoom. El Rabbit R1, diseñado para ejecutar tareas complejas usando IA, simplemente no funcionó como prometía.
La lección quedó clara: meter IA en un gadget no lo hace automáticamente bueno. Necesitas que funcione, que sea útil y que resuelva problemas reales. Estos dispositivos no resolvieron nada que tu teléfono no hiciera mejor.
El balance final: innovación real vs. humo mediático
Mirando hacia atrás, 2024 fue un año de experimentación extrema en tecnología. Algunas apuestas como el iPad Pro M4 y el Galaxy Ring funcionaron porque resolvían problemas reales con tecnología madura. Otras como los pantalones motorizados encontraron nicho pero no adopción masiva. Y muchas, como las pantallas transparentes y los gadgets de IA dedicados, se quedaron en promesas sin cumplir.
La lección más importante que nos dejó 2024 es que la innovación no es solo hacer algo nunca antes visto; es hacer algo que la gente realmente necesite usar. Los gadgets que sobrevivieron fueron aquellos que entendieron esta diferencia. Los que murieron en el intento se quedaron enamorados de su propia tecnología sin preguntarse si alguien realmente la necesitaba.
Y ahora, desde finales de 2025, la pregunta es: ¿qué gadgets de este año estarán en una lista como esta dentro de doce meses? Porque si algo nos enseñó 2024, es que lo más llamativo no siempre es lo más útil.
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