Donde elalgoritmo viene a confesar el glitch. Cortito, ácido, sin hype. Tu dosis de caos creativo para la mente 🧠

Nvidia compró tecnología de Groq y contrató a todo su equipo

Logo de Nvidia en un botón en tercera dimensión


Nvidia acaba de hacer movida que es técnicamente no una "adquisición" pero funcionalmente es exactamente eso. Licenciaron tecnología de Groq, startup de chips de IA, e incorporaron a sus cofundadores y ejecutivos clave incluyendo CEO Jonathan Ross. Según reportó The Information el 26 de diciembre, esto es acuerdo de talento y tecnología disfrazado de asociación.

Para quienes no conocen Groq: fue startup que construyó LPU (Unidad de Procesamiento de Lenguaje), chip especializado que prometía ser dramáticamente más rápido que GPUs de Nvidia para inferencia de IA. Levantaron cientos de millones en financiamiento, tuvieron demostraciones impresionantes mostrando velocidad absurda, y parecían ser competidor legítimo a dominio de Nvidia en mercado de chips de IA.

Y ahora básicamente son parte de Nvidia. Es historia clásica de Silicon Valley: startup innovadora desarrolla tecnología amenazante, gigante corporativo la absorbe antes de que se vuelva problema real.

Por qué esto no es adquisición tradicional pero funcionalmente lo es

La estructura del acuerdo es interesante. Nvidia no "compró" Groq en sentido tradicional. En lugar de eso: licenciaron propiedad intelectual de Groq, contrataron a CEO Jonathan Ross y otros ejecutivos clave, integraron equipo en división de Software Empresarial de IA de Nvidia.

Esto les da ventajas que adquisición directa no daría. Evitan escrutinio regulatorio antimonopolio que adquisición grande probablemente recibiría, no tienen que comprar toda la compañía incluyendo partes que no quieren, pueden integrar talento y tecnología específicos que les interesan sin carga administrativa del resto.

Para Groq, es salida que probablemente no es lo que soñaron pero es mejor que alternativa de quedarse sin financiamiento y cerrar. Startups de hardware son extremadamente caras de operar. Necesitas fabricación, cadena de suministro, ventas empresariales. Groq estaba quemando efectivo rápido y probablemente enfrentaba realidad de que escalar para competir con Nvidia era casi imposible.

La tecnología que Nvidia realmente quería

Los LPUs de Groq eran genuinamente impresionantes en demostraciones. Mostraban inferencia (ejecutar modelos de IA ya entrenados) a velocidades que hacían GPUs de Nvidia parecer lentas. En pruebas de tokens por segundo, Groq estaba literalmente 10 veces más rápido en ciertos casos de uso.

¿Cómo? Su arquitectura estaba optimizada específicamente para inferencia de lenguaje, eliminando componentes que GPUs generalistas necesitan pero que no son esenciales para ese caso de uso específico. Es intercambio: pierdes versatilidad pero ganas velocidad masiva en aplicación específica.

Nvidia probablemente ve valor en incorporar esas optimizaciones a su portafolio. No van a abandonar GPUs generalistas que son su negocio central, pero podrían ofrecer chips especializados para casos de uso donde velocidad de inferencia es crítica. O simplemente toman las ideas de arquitectura y las incorporan a próximas generaciones de GPUs.

Jonathan Ross: el cofundador que fue a Google, salió, construyó Groq, y ahora va a Nvidia

Jonathan Ross es figura interesante. Cofundó TPU de Google (Unidad de Procesamiento Tensorial), que fue primer chip especializado de Google para aprendizaje automático. Salió de Google en 2016, fundó Groq, y ahora va a Nvidia. Es patrón familiar en Silicon Valley: talento técnico destacado saltando entre gigantes y startups.

Para Ross, unirse a Nvidia probablemente significa: recursos masivos que startup nunca podría igualar, salario y paquete de compensación sustancial, oportunidad de trabajar en escala que Groq nunca alcanzaría independientemente.

Pero también significa renunciar a sueño de construir compañía independiente que desafíe a Nvidia directamente. Eso es intercambio que muchos fundadores eventualmente hacen: idealismo de startup versus recursos y escala de corporación grande.

Por qué esto es malo para competencia (aunque nadie lo admita oficialmente)

Nvidia ya controla aproximadamente 90% de mercado de chips para entrenamiento de IA y porcentaje significativo de inferencia. Cada vez que absorben startup que podría haber sido competidor, ese dominio se refuerza.

Imagina si Groq hubiera tenido otros cinco años de desarrollo independiente, hubiera encontrado ajuste producto-mercado en aplicaciones específicas, y se hubiera establecido como alternativa viable para ciertos casos de uso. Eso hubiera sido bueno para competencia, hubiera dado a clientes opciones, hubiera presionado a Nvidia a innovar más rápido.

Ahora eso no va a pasar. Groq como entidad independiente probablemente se va a disolver o convertir en subsidiaria insignificante. La tecnología va a Nvidia, donde será usada de formas que benefician estrategia de Nvidia, no necesariamente de formas que benefician competencia en mercado.

El patrón más amplio: gigantes tecnológicos absorbiendo innovación

Esto no es incidente aislado. Es patrón que vemos una y otra vez: Google comprando DeepMind, Facebook comprando Instagram y WhatsApp, Microsoft comprando GitHub y LinkedIn, Amazon comprando Whole Foods y Ring.

Gigantes tecnológicos no pueden innovar tan rápido como startups pequeñas, entonces compran innovación. Es estrategia racional desde perspectiva de accionista: reduce competencia futura, adquiere talento y tecnología, mantiene dominio de mercado.

Pero es problemático desde perspectiva de ecosistema tecnológico saludable. Si camino de startup exitosa siempre termina en ser adquirida por uno de los cinco gigantes, entonces estamos construyendo oligopolio, no mercado competitivo.

Qué significa esto para otras startups de chips de IA

Hay docenas de startups trabajando en chips especializados para IA: Cerebras, SambaNova, Graphcore, Tenstorrent (de Jim Keller), entre otros. Todas enfrentan mismo desafío fundamental: competir con Nvidia es extremadamente difícil.

Nvidia tiene: décadas de experiencia construyendo chips, ecosistema CUDA que hace sus GPUs predeterminadas para desarrolladores, cadena de suministro establecida y capacidad de fabricación, efectivo infinito para investigación y desarrollo, dependencia con casi todos los proveedores de nube grandes.

Para startup, camino a éxito independiente requiere: encontrar nicho donde son significativamente mejores que Nvidia, construir ecosistema de software suficientemente bueno, convencer a clientes de apostar en ellos sobre jugador establecido, sobrevivir financieramente durante años antes de alcanzar rentabilidad.

Es por eso que muchas probablemente terminarán como Groq: adquiridas o absorbidas antes de alcanzar verdadera independencia. No porque sus tecnologías no sean buenas, sino porque competir con Nvidia es básicamente imposible sin recursos de otro gigante tecnológico.

El momento: por qué ahora

Este acuerdo pasó a finales de 2025, momento específico. IA está en pico de exageración pero también hay señales de corrección. Según reportes recientes de MIT Technology Review, muchas empresas intentando implementar IA encontraron poco valor real. Financiamiento para startups de IA se está volviendo más selectivo.

Groq probablemente enfrentaba recaudación difícil para próxima ronda. Inversores están más cautelosos después de años de valuaciones infladas. Para Nvidia, es momento perfecto para hacer acuerdos: startups están más dispuestas a negociar, valuaciones son más razonables que hace año, y pueden consolidar posición mientras competidores debilitan.

Lo que nadie está diciendo públicamente pero todos piensan

En conversaciones privadas en Silicon Valley, esto es visto como: Groq "falló" en sentido de no lograr independencia, pero "tuvo éxito" en sentido de salida decente para fundadores e inversores. Nvidia es visto como implacable en mantener dominio, pero también admirado por ejecución estratégica.

Hay reconocimiento cínico de que mercado de chips de IA es básicamente juego terminado para nuevos entrantes a menos que tengas respaldo de gigante tecnológico (como TPUs de Google o Trainium de AWS) o gobierno (como chips chinos). Startups independientes pueden innovar pero no pueden escalar para competir realmente.

Qué pasa con empleados de Groq que no fueron a Nvidia

No todos en Groq fueron incorporados a Nvidia. Solo CEO y "ejecutivos clave" fueron mencionados. ¿Qué pasa con otros ingenieros, ventas, operaciones? Probablemente enfrentan incertidumbre: algunos podrían ser contratados por Nvidia eventualmente, otros tendrán que buscar nuevos trabajos, algunos podrían unirse a otras startups de IA.

Es lado menos glamoroso de estos acuerdos. Titulares hablan de tecnología y fundadores, pero hay docenas o cientos de empleados cuyas carreras son interrumpidas sin mucho control sobre situación.

El mensaje para fundadores de startups de hardware

Si estás considerando fundar startup de hardware compitiendo con jugadores establecidos, acuerdo de Groq-Nvidia debería ser llamada de atención. Camino a salida probablemente es ser adquirido, no oferta pública inicial o independencia perpetua.

Eso no significa no hacerlo, pero significa ser realista sobre resultados probables. Construye con eso en mente: tecnología que tiene valor para adquirente potencial, relaciones con equipos de desarrollo corporativo de gigantes, momento de recaudación que permite sostener hasta adquisición sin desesperarse.

Y si tu objetivo es construir compañía verdaderamente independiente desafiando empresas establecidas, necesitas ventaja estructural masiva que startups de hardware típicamente no tienen. Es por eso que startups de software tienen mejor historial de independencia: menores barreras de capital, ecosistemas más abiertos, costos de cambio más bajos para clientes.

El futuro: más consolidación, menos competencia

En próximos años, espera ver más de esto. No solo en chips de IA sino en IA en general. Gigantes tecnológicos van a: adquirir startups prometedoras antes de que se vuelvan amenazas, hacer contrataciones para obtener talento sin comprar compañía completa, licenciar tecnología estratégica de startups que no quieren ser adquiridas totalmente.

El resultado es concentración de poder e innovación en manos de puñado de corporaciones. Es eficiente desde perspectiva de esas corporaciones, pero significa menos competencia, menos innovación disruptiva, y menos opciones para clientes y empleados.

Groq-Nvidia es solo ejemplo más reciente de ese patrón. No será el último. Y cada vez que pasa, dominio de empresas establecidas se refuerza un poco más, haciendo aún más difícil para próxima generación de startups competir independientemente. Es ciclo que se auto-refuerza, y no está claro qué lo va a romper.


// INGRESA TU ANÁLISIS

0 Comentarios

Ajustar cookies